viernes, 16 de diciembre de 2011

¡Por fin!

La época navideña, siempre ha sido una de mis favoritas. No puedo explicarlo exactamente. Puede ser que desde que era niña, siempre esa época estuvo vinculada con las fiestas que había alrededor; con los juegos por las tardes con mis amiguitos del barrio y con mis hermanos sin preocupación de tareas, y sobre todo...¡con la emoción de la llegada de los famosos "Reyes Magos"! para cerrar esta etapa. No hay queja de mi parte, mis papis nos compraban de lo mejorcito de juguetes y que estaban de "punta de lanza", pero bueno, eso es para otro post, je,je. Hoy en día, observo en todos los niños esta misma esperanza en sus ojos, el mismo gozo de unas vacaciones llenas de felices circunstancias como el también ya famoso intercambio de regalos. Cabe decir, que cuando niña, como no asistía a ninguna iglesia, pues me procuraba de todas las fiestas que hubiera en todas las religiones habidas y por haber y que nos invitaban y como no teníamos impedimento para asistir de parte de nuestros padres ¡pues más la gozábamos!, ja,ja,ja,ja, ¡qué barbaridad! -desde las mañanitas a la guadalupana, hasta las pachangas con los Testigos de Jehová, pasando también a la asistencia de los programas navideños de las diferentes iglesias evangélicas-. Si de por sí ya era "piñatera" (me encantaba pasar a pegarle a la piñata y trataba de asistir a la mayoría de las posadas que había en el barrio) y hasta tenía mi técnica para recoger dulces cuando se rompiera la piñata, por eso me encantaba siempre ir de vestido pomposo a las piñatas, ja,ja,ja,ja. Es lindo recordar ¡sigh! (suspiro) y todavía me lleno de emoción al llegar estas épocas. Claro que ahora han cambiado las cosas que hago, porque comprendo exactamente el mensaje verdadero de lo que es la navidad, me olvido de ponerme muy "correcta" de que el Señor Jesús no nació el 24 de diciembre, creo que todos los que hemos leído la Biblia nos damos cuenta de eso; además, tenemos la propaganda de una navidad muy europea porque acá...¡nunca cae nieve! ¡y yo coloco muñequitos de nieve en árbol!, ja,ja,ja,ja, sólo que sean de las nieves del malecón. Tenemos en México varios lugares en donde sí la hay, pero en el Puerto...¡para nada! Además, la figurita que usan como representación del niño Jesús, lo ponen muy ario, ja,ja,ja,ja, pero ahora, los hijos de Dios, aprovechamos la oportunidad para compartir el mensaje de lo que significa todo este barullo que hacen los demás y además, también podemos invitar al intercambio de regalos a mujeres que por otras razones no irían al local, je,je, ¿a quién no le gustan las fiestas? Sé que siempre hay las excepciones a las reglas, así que no dudo que no haya por ahí alguien que diga: ¡a mí no me gustan! ¡y les doy la razón! ¿quién soy yo para juzgar? pero a mí...¡me encantan!; además...¡me encanta escuchar y cantar: "Noche de Paz" ¡qué hermoso!

Por lo pronto, el día de ayer, ya tuvimos el intercambio de regalos con "Las Juanitas", tuvimos un excelente tiempo todas las "viejitas", ji,ji,ji. El martes nos toca a la femenil en general, y lo que me gusta es que la regla no es llevar un regalo caro, sino un regalo útil, femenino, práctico y al alcance de la alcancía de cada una y ya quedamos ¡en que nadie se va a quejar! Ya lo hemos hecho así por dos años seguidos ¡y nos ha dado buenos resultados! Me han tocado: una servilleta para las tortillas bordada por la misma hermana que me dio el regalo; en otro año, unos trastes para llevar el almuerzo, así que le ha servido este último regalo muchísimo a mi hija que trabaja y necesita llevarse su "lunch", je,je, han sido regalos buenos, bonitos y baratos y además, así disminuímos el estrés de estar pensando "¿qué llevo?" porque se trata de compartir no de estresarse o angustiarse ¡ups! Y no digamos más sobre la comida especial en la Cena de Navidad, ¡uuuuuy! ó más bien, debo decir: ¡hmmmmmm! Espero que no me falle el adobado en lo cual voy a hacer el lomo. A mi esposo le encanta el lomo en salsa de frutas, pero este año ¡le cambio el menjurge que le voy a poner, porque lo voy a adobar ¡hmmmmmm! ¡srlup! y él dijo que ¡SIIIIIII!. Como me gusta compartir, pueden venir, siempre habrá un plato listo para quien llegue. Ya tengo preparadas las cosas que voy a utilizar para ese día porque no me gusta andar en los amontonamientos ¡ayayayayay! Me faltan algunas cosillas para el Pastel Alemán porque nos gusta que el coco rayado esté fresco y no viejo, pero en estos días compro las cosas que me faltan. También ya está listo y colocado en el árbol junto con los regalos para la familia y el texto que nos aprenderemos o repasaremos este año: "Pero el ángel les dijo: No temáis; porque he aquí os doy nuevas de gran gozo, que os será para todo el pueblo: que os nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Señor." Lucas 2:10,11. Que el Señor haya nacido ya en sus corazones tal como ya lo ha hecho en el mío para disfrutar a plenitud su paz, gozo y todas aquellas cosas las cuales Él nos da cuando le recibimos en el corazón desde que estamos en esta tierra y podemos disfrutar ya desde ahorita. Desde el manantial un deseo muy grande para que tengan ¡Una feliz Navidad con Cristo morando en sus corazones! Y todavía amenazo con colocar otro post antes de dar por finiquitado este 2011, mientras tanto, a todos mis hermanos en la fe que no los puedo ver, como diría Spurgeon: ¡Nos vemos en el cielo! Besitos a todos.