Antes de...

Antes de que llegue el 8 de julio, quiero colocar este canto, que me ¡encanta! Vean por favor la letra. Sé que no todos lo podemos decir, pero qué bueno que así pudiera ser, y esto lo digo por escuchar a mi esposo batallar con el novio -que como se estila ahora vive con la novia- que anoche, ¡ya noche! trajo a la novia desmayada, toda intoxicada con droga en su cuerpo y se le había pasado la mano, ¡ay!
El pobre chico ante esta situación y no sabiendo a quién acudir, pensó: "mi médico..." y...¡ayayyaay! ¡Uf! hay situaciones que luego la gente que no está en esto, piensan que con la sola presencia del médico ¡todo desaparece! Por la gracia de Dios, mi esposo la pudo sacar ¡con Homeopatía! ¡aunque muchos no lo crean! (y abro este paréntesis para mandarle desde este manantial una felicitación a mi esposo como médico, ¡arriba Rudy! ¡muacccccs y chuiquitos!) e inmediatamente la mandó a un Centro de Rehabilitación Cristiano. ¡Sólo Cristo puede hacer la diferencia!... ¡COMPROBADO, Y RATIFICADO! Y aunque yo jamás le hice a esas cosas, sé que hay situaciones muy dentro del corazón que son peores que estas drogas, así que cuando vi este canto -el mes pasado en un Regional Juvenil- me encantó por la letra y también por la música. Me gustó e incluso le escribí al margen: "para post", y uniendo todos los acontecimientos, se los quiero poner ya, porque es una realidad en mi vida y no porque yo sea la gran persona, sino que Cristo hace el cambio y lo hizo en mí.

"Gracias, Señor, por todos esos años
cuando hablabas a mi corazón.
Con qué paciencia tú me esperaste,
gracias, Señor, por ese gran amor.

Gracias, Señor por tu misericordia:
me recibiste tal cual un día fui.
No era nadie, ni tenía nada,
Gracias, Señor, por aceptarme así.

Gracias, Señor, dejaste tus pisadas
y me invitastes a tomar mi cruz.
Todo entregaste: todo ahora pides,
Gracias, Señor, por ser mi ejemplo tú.

Gracias, Señor, por darme tu confianza
y por pensar que puedo útil ser.
A ti me entrego y yo a mí renuncio,
Gracias, Señor, por lo que harás de mí.

¡Saludos y bendiciones desde el manantial!

"Día del padre!

Cada tercer domingo de junio, se celebra aquí en México el ¡Día del padre! y pues como en muchos lugares, en nuestra congregación se les hizo una comida en honor de ellos. Primeramente hubo algunos cantos agradeciendo a Dios el habernos provisto de un papá que nos cobijara, educara, etc, y algunos salmos o poesías leídos por los niños ó jóvenes, para ellos. Algunas clases prepararon regalos para los papis de los alumnos, etc,etc, y lo que debió ó pudo ser un buen festejo para mi esposo, al pobre le agarraron las carreritas porque a mi personita, se "le ocurrió" por primera vez, presentar un problema de presión alta. ¡Sigh!(suspiro) ¡pobre esposo mío! Él en plena tribulación por su esposa, no pudo disfrutar nada porque aunque participé con mi grupo (¡ya habíamos ensayado y teníamos los regalos para los papis!), él me veía mal ¡y estaba mal!, así que terminado todo, tuvimos que salir para casa y como ahí se encuentra en un apartado el consultorio, pues de inmediato, una de las cosas que hizo, fue checarme la presión y ¡zaz! ¡la tenía en cifras más arriba de lo correcto! Bueno, tiempo después, al verme reaccionar muy bien ante la medicina e irme componiendo, él se alegró y creo que eso fue su mejor regalo del día del padre, ja,ja,ja,ja. Este regalo no es para nada recomendable, así que ¡no lo den!, je,je. ¿Se imaginan? ¡uf! Pero cosas de la "viejetud" digo yo, ja,ja,ja,ja, no cabe duda que ya empecé a dar "el viejazo" tal como la Susú -la gata de Raquel- Pero de cualquier manera, vaya desde este manantial un saludo muy afectuoso a todos los bloggeros que son padres (especialmente a mi amado esposo aunque él no hace esto de bloggear) y deseando que el Señor les siga bendiciendo, fortaleciendo y ayudando a seguir adelante siendo buen ejemplo para sus hijos, y aún en la vejez fructificarán y crecerán vigorosos y fuertes como dice el salmo 92:14

El verdadero problema teológico

Quiero poner en este nuevo post, una frase que me gustó mucho y pertenece al hermano Humberto Pérez.

"La raíz de todos los problemas teológicos del cristianismo es la falta de santidad y dedicación a Dios de parte de la iglesia."

Humberto Pérez.

2 Cr. 28: 22,23 (Acaz)

Yo pienso que es muy cierto, ¿y tú, qué piensas?

¡Chuiquitos!!!!! :]