Ando navegando por los blogs, aprovechando que tengo un poquitín de tiempo libre y... ¡mamma mía! Si fuera un instrumento y pudiera hablar, diría: ¡estoy desafinada!, pero ya no puedo darme ese "gustito". Ya tengo edad para poder observar, orar y tratar de poner mi "grano de arena".Sé -y no me espanto ya de nada- ( a esta edad, no puedo darme ningún lujo de espantarme, je,je) que el pecado ha sobreabundado, pero cuando leo los diferentes blogs y capto o leo de plano, por ejemplo, que el autor o autora ¡está saliendo del closet! (como se dice en vox populi), como un ejemplo de lo que estoy hablando, este ¡mamma mía!, más que un grito de espanto, es un dolor salido desde el fondo de mi corazón.
Aunque tuviese 18 años, la situación sería la misma. No es un dolor salido sólo del corazón de madre, sino salido al conocer que el tiempo se acerca en que el Señor vendrá: " como en los días de Noé..." Este dolor no es porque Él ya venga, sino porque hay esperanza para ellos y quizá no conozcan las buenas nuevas de parte de Dios o quizá su corazón esté tan endurecido que ya no hagan caso y se rían...¡como en los tiempos de Noé!
Espero cosas peores, porque cualquiera que ha leído la Biblia, lo sabe.
También conozco y miro, ¡me doy cuenta! que son jóvenes que SI TIENEN REMEDIO. ¡Ay! Si hubiese alguien cerca... Si hubiese quien quisiera ponerse en la brecha como dice Ezequiel.
¡Ups! este "piedrazo" es para mí primero. Me entra la desesperación, al sentir mi cuerpo declinar, con menos fuerzas que anteriormente. Con tantas cosas por aprender y hacer. Me siento tan inútil. Sólo puedo orar, y también escribir.
Cuando también capto el sentir del grito de ayuda de muchos bloggeros jóvenes que se sienten al final del mundo, cuando ellos sienten que su vida ya no tiene propósito y en sus escritos lo dicen sin decirlo. Es desesperante, leer el clamor apagado y sordo, tal como el grito silencioso del neonato que está siendo atacado para ser abortado, ¡sigh! Triste realidad.
Yo no puedo hacer nada, sólo hablar o escribir, según se trate, y sobre todo ¡orar! porque es el Espíritu Santo el que hace la obra.
Cuántos hijos de Dios arrastrados en la corriente del mundo porque no han podido comprender que desde el momento en que Cristo ha perdonado nuestros pecados, ya todo ha cambiado, por lo tanto, ese "no sentirme a gusto con lo que hacía antes" debe existir porque ahora soy nueva criatura.
Creo que nosotros los "viejitos", debemos de tenderles las manos, aunque sea virtualmente a todos estos jóvenes y decirles: "toma mi mano amiga" y aunque nunca nos veamos, es maravilloso sentirse con un amigo(a) con la cual podamos platicar aunque sea de muy lejos.
A veces los "viejitos cristianos" o nos dejamos seducir con: "en mis tiempos no..." o simple y sencillamente, si leo la Biblia, no capto nada del verdadero significado de lo que es seguir a Cristo y por lo tanto en lugar de ayudar, conflictúo más a la persona. Puedo ser, aunque tenga pocos años -cronológicamente hablando-, ser un "viejito cristiano". Y he observado como algunos jóvenes, para demostrar, en un impulso de rebeldía mal llevada, decir palabras inútiles -la Biblia las llama "sapros"- y marca, como en Efesios 4:29, que yo como hija de Dios, no deben existir en mí. ¿Porqué?, porque la Biblia me dice que ¡ninguna palabra "sapros" debe salir de mí! (en mi Biblia dice: corrompida). ¡Ay! Pero es de moda, que entre más palabras corrompidas hablo, más rebeldía demuestro, soy más "de onda", ¡sigh!
¡Ay!, qué malos conceptos tenemos los "viejitos cristianos" aunque sea joven como ya dije y nuestros posts están llenos de puras palabras corrompidas, aunque esté diciendo lo correcto, pero, ¿acaso no puedo decirlo sin tantas palabras "sapros"? y si escribir las palabras que sean buenas para la necesaria edificación, cuando deberíamos demostrar a los demás, que sí podemos vivir bien (y no me refiero a dinero), sino a vivir "contra corriente". Esto es algo que le tengo que agradecer a mi papi. Me enseñó a "nadar contra corriente". No es nada fácil y peor se pone la cosa cuando es uno cristiano, porque la corriente del mundo va ¡y yo vengo!
Créanme chicos que sí entiendo cuando enfrentan estas situaciones, pero no me refiero a las situaciones provocadas por las cosas pecaminosas que a Dios no le agradan y que escribí arriba. Sino a los desprecios o hasta sentirse "extraterrestre" en comparación con los demás compañeros porque uno no comparte su desenfreno ni orgías. Sí, leyeron bien, ¡Orgías! ¡Qué solo se siente uno en esos momentos!.Como desterrado. La fe se templa. El ánimo se desquebraja, pero dentro de todo, Él está ahí...¡conmigo!
Si lee uno la Biblia, encuentra que dice: "yo estoy contigo..." (lo dice en múltiples textos). "Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo." (Isaías 41:13)
Mi oración inicia hacia mi persona, que pueda tener la capacidad de ayudar, y que en lugar de desayuda, sea lo contrario. No para que nadie me aplauda o diga cosas lindas de mí, sino para verdaderamente ayudar, pero sobre todo, manifestarles que en Cristo hay esperanza. Quizá estos jóvenes han asistido a iglesias en donde sólo les han enseñado costumbres de "no hagas ésto, no ..." tal como lo dice Colosenses 2: 20-23, y claro lo dice la Biblia en el v.23 que tales cosas tienen cierta reputación, pero no tienen valor alguno contra los apetitos de la carne.
Entonces, ¿qué está bien, qué está mal? Bueno, sólo basta leer la Biblia para darse cuenta que ahí se mencionan algunos pecados: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías y cosas semejantes a estas (Gálatas 5: 19-21) Y sigue la lista: los cobardes, incrédulos, abominables y homicidas, fornicarios y hechiceros, idólatras y todos los mentirosos. Bueno, eso es una muestra (Apocalipsis 21: 8). Además: injustos, fornicarios, perversos, avaricia, maldad, llenos de envidia, homicidios, contiendas, engaños y malignidades, murmuradores, detractores, aborrecedores de Dios, injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres, necios, desleales, sin afecto natural, implacables, sin misericordia, los que se acuestan con hombres siendo hombres, y mujeres con mujeres (Romanos 1:18-32) y faltó poner los que se complacen con las que practican tales cosas, ¡uf! la lista es super grande, porque no les puse los diez mandamientos, je,je. Estoy segurísima que los que han leído y saben más de la Biblia, les pueden mencionar más, pero no se trata de hacerlo, cada individuo, no importa su género, sabe que es pecador, y que un día va a presentar cuentas delante de Dios, aunque diga "eso no es cierto".
Como les comentaba, que mi primera oración es por mí misma, y la segunda por los demás. Si yo no estoy bien, no puedo ayudar.Y este es mi pensamiento mientras hago este post. ¿Cómo estoy, tanto en relación con Dios mismo y con respecto a los demás?
Para los que NO son de Cristo, hay un llamado: "Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuentas...". Y para mí: que no haga lo que hacen muchos:"que entre lo santo y lo profano no hicieron diferencia, ni distinguieron entre inmundo y limpio." ¡Ay! Que el Señor me permita tener el valor y pujanza necesaria para ponerme en la brecha. Esta es mi oración.
Gracias por leerme. Es un honor muy grande que me conceden. Por ésto: ¡Muchas gracias! y oraré por cada uno según lleguen sus comentarios.
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