¡Hoy es un día especial para mi esposo y para mí! El Señor en su misericordia, nos permite cumplir 39 años de casados! ¿Cómo lo vamos a celebrar? ... ¡Yendo al cementerio! Dice en la Biblia que es mejor ir a casa de luto porque nos hace pensar en la fragilidad de nuestra vida y como dice el Salmo 90:12: "Enséñanos a contar de tal modo nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría y sepamos cuán frágiles somos." No estoy escribiendo exactamente letra por letra tal cual aparece en la versión Reyna Valera que tengo, es lo que guarda mi cerebro pero que mueve mi corazón en alabanza y adoración a mi Dios para decir: "Gracias Dios por fortalecernos y concedernos llegar a este 39° aniversario" ¿Y estamos como masoquistas yendo al cementerio? NOOOOO!!!!!! Acompañamos a nuestra consuegra a depositar en la tierra a su compañero de la vida de muchísimos años, por eso es que podemos decir mi esposo y yo: EBEN-EZER, por haber podido despertar juntos y unidos en su amor con la bendición que Él nos concedió hace 39 años y seguiremos así hasta que Él nos permita tal dicha.
¡Gocémonos y alegrémonos porque este es el día que hizo Jehová! Queremos compartir nuestra alegría con ustedes. ¿Mañana?..... no sabemos si estaremos aún en esta tierra porque hay vida después de esta vida y la vida aquí es frágil, pero para todos los que me leen y tienen a Cristo como su Salvador, diré como dijo Spurgeon: "Nos veremos en el cielo"
Y para los que no es así, Cristo no es religión, es Vida Eterna y sólo les escribiré: "Te lo dije". No quiero terminar de escribir dejando así esto, con esta clásica advertencia que tanto es atacada ahora, sólo volver a repetir y decirles: "Hoy es el día aceptable, hoy es el día de salvación!" ¡Gracias por leerme!
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