Palabras para poder expresarme y decir lo que tengo dentro. Explico: Siempre he pensado que todos necesitamos una segunda oportunidad, algo que narra la novela, y no lo hace desde un principio, sino como un cierre de oro a la narración. Y como por diversas situaciones de mi existencia, en todos estos veinte años de mi vida, he andado a la búsqueda de palabras para poder expresarme. Y buscando de qué manera poder explicarles a mis alumnas adolescentes sobre la conversión en Cristo y el testimonio que damos y además, poder decirles la diferencia entre 1 Juan 1:7 y 1 Juan 1:9 (perdón judicial y perdón paternal) y poder darles la esperanza de una segunda oportunidad, al terminar de leer esta novela de Keila, a más de que en muchas partes de la narración ¡lloré!, ¡Vaya! ¿será que ya estoy viejita? Creo que más bien es que la autora nos hace vivir las situaciones humanas, de manera tan personal a cada lector, que nos hace llorar, así que puedo decir: ¡hallé las palabras para expresar sobre la segunda oportunidad que Dios siempre nos ofrece!
Es tan triste observar el cuerpo inerte porque el imperio de la muerte reina sobre él en un suicida, que siempre me preguntaba: ¿habrá obtenido alguna segunda oportunidad? ¿No encontró a alguien que le tendiera la mano y le dijera que hay esta esperanza? ¡Sigh! ¡Cuántas tristezas y desesperanzas, además de confusiones hay alrededor de un suicida. Olvidamos que hay siempre una segunda oportunidad. Por eso me conmovió muchísimo esta novela, ¡que no habla de suicidas!, pero nos hace ver la facilidad en que podemos perder el rumbo de nuestra vida. No seamos egoístas, y miremos alrededor, siempre habrá alguien junto a nosotros que estará esperando una sonrisa que le caliente el alma, o una mano amiga que le levante el ánimo y pueda vislumbrar que siempre hay una segunda oportunidad, pero sobre todo, hay un Dios que le está esperando con los brazos abiertos tal como lo hizo en la cruz para expiar nuestro pecado. Ya no tenemos que cargar con esas culpas porque ya no nos pertenecen, Él las llevó sobre el madero, pagó con sangre el precio que se pedía por nosotros. ¿Queremos algo más? ¡Dios me ama! Y tanto, que como dice Isaías 53: 4,5: "Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados."
¡He aquí nuestra segunda oportunidad que nos dará VIDA ETERNA!
8 comentarios:
Le deseo mucha suerte, Kelia es muy parecida a ti, persona con gran corazón, de una gran sensibilidad y gran capacidad creativa…me gusta ver su blog!.
Se que pronto sera mama, sera una super madre!
¡Tienes razón Rafa! Keila va a ser una mamá de lujo para Ibrahim. Ya avisaré cuando nazca.
Gracias por venir.
Saludos.
...El tema del suicidio y los suicidas para mí es un tema tabú. Pero con lo que acabo de leer, creo que tendré que buscar el librito de marras y abordarlo sin prejuicios iniciales.
Gracias por el dato
¡Hola, Alí! ¿Porqué es tabú para ti el suicidio? Te aclararé que en el libro para nada hablan sobre eso, pero ante tantas cosas alrededor de los diferentes personajes y las segundas oportunidades que tienen muchos, me hizo pensar en lo suicidas y en lo que hubiesen hecho si hubiesen tenido una segunda oportunidad.
¡Gracias por venir al manantial mi querido hermano!
Todavia no lo he leido, pero se que un dia llegara a mis manos.
Siempre he estado impresionado por el talento de Keila para escribir!
¡Hola, Andrés! Comparto contigo el mismo sentir.
Un fuerte abrazo hasta tu tierra adoptiva.
Esta novela es hermosa!, yo la leí dos veces de corrido, me encantó. Espero ansiosa el nuevo libro de Keila.
Abrazos Isa.
Gracias, Brisa por venir al manantial. ¿Verdad que sí es linda la novela? A mí también me encantó y también espero pronto leer algo de keila, aunque no creo que sea tan pronto como nosotros anhelamos.En fin, es un anhelo.
Besitos
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